CAMPEONATO DE ESPAÑA DE ACUATLON
Buen calentamiento. Las cortas y explosivas distancias de esta prueba, y el enorme nivel de los corredores contribuyen por igual a que haya un vertiginoso ritmo desde el primer metro. Me preparo mentalmente para calmarme, no quiero gastar mis pocas balas en el primer segmento.
Tras el bocinazo enfilamos en buena posición la primera curva. Desde ahí ya se escapan los elegidos: Noya, Gomar, Naranjo, Uxío,... Yo marco mi ritmo en un grupo posterior. Con mi amigo Pedro Miguel Reig tratamos de no perder las opciones de disputar a la vez que guardamos fuerzas para el decisivo tramo de natación. Nos relevamos y animamos mutuamente. Con nosotros otro gran tiburón, Albert Parreño. La táctica está saliendo a pedir de boca.
Entrando a boxes encabezo nuestro grupo. Con tantas ganas que me paso de mi caja de boxes. Retrocedo intentanto no perder más tiempo. -"¡Tengo que redurcir esos 5 metros que me acaban de quitar mis compañeros!"- Va a ser que no Antón. Entro en el agua con esos 5 o 6 metros de desventaja. Sprinto todo lo que me dan los brazos. Va a ser que no Antón. Pedro y Albert se escapan en el horizonte. Ellos muestran su poderío acuático cazando a los mejores de la primera carrera.
Creo que toca sufrir. Una oportunidad se ha ido, pero pronto se me escapará otra. Pedro Miguel Serrano me sobrepasa por la izquierda. Lo estaba "esperando", me concentro en su estela. Demasiado ritmo para mis, aun, pobres brazos. Extraña situación para uno que está acostumbrado a remontar en el agua el ver como una tras otra va perdiendo posiciones.
No serían las últimas, llegando a la playa me rebasan Germán y Mateo (¡vaya carrerón el suyo siendo veterano!). Abandono las frías aguas de Caranza sabiendo que voy muy lejos de los puestos de honor. Me calzo otra vez las NEW BALANCE pensando en "correguir" mi floja natación.
Inútil. La carrera ya va muy rota, consigo recuperar mi posición con Germán, y me defiendo de los que me respiraban en la nuca tras el agua. Finalmente soy 11º. Una posición mediocre pero que no me puede dejar mal sabor de boca. Más bien todo lo contrario, después de dos meses vuelvo a cruzar una línea de meta. Día a día voy limando mis debilidades. Este domingo nueva parada para seguir disfrutando, Triatlon de Arteixo.
0 comentarios:
Publicar un comentario